Porque veintiocho no es nada,
porque no es más que un conjunto dentro del camino,
un laberinto dentro de un sentimiento,
este sentimiento que sabemos que ahonda dentro.
Porque veintiocho no es sino paz,
amaneceres y atardeceres,
juntos sin más escudo y fortaleza,
que nuestras pieles sin vestimenta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario