Me muerdo las ganas de verte.
Y con cada mordida, me impaciento un poco más.
Con cada sacudida sobre mi labio inferior mis ganas aumentan cada vez más.
Y no hago otra cosa que desearte.
Ven ya, que estas ganas de tocarte y acariciarte me consumen por dentro.
Ven ya, que el fuego solo puede apagarse con fuego.
Que la llama, solo puede consumirse con otra llama aún mayor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario